Nadie puede discutir que la situación actual a cambiado mucho en los últimos años, porque todos los que vivimos en un país “desarrollado” hemos notado un gran cambio en los últimos años, todos hemos vivido el inicio del móvil, desde aquellas maletas que salían en las películas americanas y todos pensábamos que se trataba de ciencia ficción, hasta hoy en día donde se están estudiando móviles tan pequeños que se podrían llevar implantados en el interior de la oreja.
Si este negocio ha cambiado tanto en los últimos años nadie puede negar que han cambiado muchos conceptos de cara a hace tres generaciones, nuestros abuelos se criaron entre guerras, donde era muy difícil estudiar, así que el que conseguía aprender a leer y a escribir era un privilegiado, las familias, mayoritariamente tenían muchos problemas para llegar a fin de mes, había mucha gente en la cárcel, poco trabajo y mucha pobreza, así que tenían que empezar a trabajar a una edad muy temprana. Esas no son las condiciones que tenemos hoy en día ni que tienen nuestros hijos, por esa razón los conceptos van cambiando.
Alfabetización, según la Real Academia De La Lengua Española significa “enseñar a leer y a escribir” se supone que si una persona es alfabeto tiene los conocimientos básicos para desenvolverse en el mundo que nos rodea, pero la pregunta es:
¿Una persona que sepa leer y escribir ya esta listo para desenvolverse en el mundo actual?
Quizás entre la gente mayor la inversión en reducir la brecha digital pase, por un lado, por aportar destrezas y conocimientos en informática y el uso de los lenguajes y equipos multimedia. Y por otro, en crear contenidos educativos tan útiles como amigables.
Pero entre los niños y las niñas y jóvenes en general, mi sensación es que “los aparatos” y los programas no son, en ningún caso, el obstáculo que distancia a los “competentes digitales o multimedia” de los que no lo son. Sólo hacen falta cinco minutos de observación de un niño de 7 años jugando a la famosa “Play Station” o a una niña de 10 chateando con los compañeros, a través del “Messenger”, o buscando información en el Google para realizar un trabajo de clase, para convencerse que el problema no está en el uso de los artilugios de componente informática.Ahora bien, los medios de comunicación actual (televisión, radio y prensa) y, con seguridad, los que van llegando a través de Internet, se han convertido en un elemento fundamental de estructuración de la sociedad actual, tan relevante como la familia o la escuela. Si estos medios de comunicación libres no siguen una lógica educativa en su mayoría de casos, la alfabetización digital pasa también por aportar a sus usuarios una actitud crítica ante unos emisores irresponsables en muchas ocasiones.La alfabetización digital implica, asimismo, saber buscar, seleccionar, ordenar e interpretar los contenidos disponibles en el mercado multimedia, siendo capaces de valorarlos y darse cuenta de cuáles son presentes fácilmente y cuáles más difíciles de encontrar.
martes, 2 de septiembre de 2008
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